Decenas de asociaciones médicas impulsan el pago de un «honorario médico ético mínimo» por parte de los beneficiarios de proveedores de medicina prepaga y obras sociales.
Este primer lunes de octubre entró en rigor el «honorario médico ético mínimo» por el que los usuarios de prepagas y obras sociales tendrán que abonar hasta $6 por las consultas a los profesionales.
La iniciativa impulsada por alrededor de 30 asociaciones de medicina argentina busca que la diferencia entre ese monto y lo que las prepagas u obras sociales cubran deberá ser asumida por el paciente en forma de un «bono complementario no reintegrable».
«Si lo que recibimos del sistema (obras sociales, prepagos, sanatorios, entre otros) es menor a este monto, la diferencia será cubierta por el paciente como un bono complementario no reintegrable», detallaron fuentes del sector.
En un comunicado emitido durante el Día de la Sanidad, los médicos argumentaron que la decisión fue tomada debido a que los honorarios médicos han recaído «al nivel más bajo de la historia en el país».
Sin embargo, desde las empresas de la medicina prepaga advirtieron que los copagos no están en los contratos con los médicos y que, en caso de que se cobre un extra, el paciente debe informar a su proveedor para iniciar un sistema de reintegros y posibles sanciones al profesional que lo haya cobrado.